La corona y la carilla dental son dos tipos de tratamientos dentales que se utilizan para mejorar la apariencia y la salud de los dientes. Ambos pueden ser efectivos para restaurar los dientes dañados, pero hay algunas diferencias clave que los pacientes deben tener en cuenta antes de elegir uno u otro. ¡Te las contamos!
¿Qué es una corona dental?
Una corona dental es una cubierta protectora que se coloca sobre un diente dañado o desgastado. Se utiliza para proteger el diente de cualquier daño adicional y para mejorar su apariencia. Las coronas dentales se utilizan comúnmente en situaciones en las que un diente ha sufrido una fractura significativa, tiene una caries grande, ha sido sometido a un tratamiento de conducto o se ha desgastado significativamente debido al envejecimiento o la molienda.
¿Qué es una carilla dental?
Una carilla dental es una lámina delgada de porcelana o resina compuesta que se adhiere a la parte frontal de un diente para mejorar su apariencia. Las carillas se utilizan comúnmente para corregir la apariencia de los dientes manchados, astillados, desgastados o espaciados. A diferencia de las coronas, las carillas dentales no se utilizan para proteger los dientes dañados o debilitados.
¿Qué diferencias existen entre ambas?
Una de las principales diferencias entre las coronas dentales y las carillas dentales es la cantidad de preparación dental necesaria antes de cada tratamiento. Para colocar una corona dental, el dentista debe eliminar una cantidad significativa de estructura dental del diente original para que la corona se ajuste de manera adecuada y segura. Este proceso puede ser doloroso y puede requerir anestesia local. Por otro lado, las carillas dentales requieren mucha menos preparación dental. El dentista solo necesita quitar una cantidad mínima de la superficie del diente original para que la carilla se ajuste de manera adecuada y segura.
Otra diferencia importante entre las coronas y las carillas dentales es su durabilidad. Las coronas dentales son típicamente más duraderas que las carillas dentales porque cubren el diente entero. Las coronas pueden durar varios años o incluso décadas con el cuidado dental adecuado. Por otro lado, las carillas dentales son más delgadas y, por lo tanto, menos duraderas que las coronas dentales. Las carillas pueden durar varios años, pero a menudo requieren reemplazo o reparación después de un cierto tiempo.
El costo también puede ser una diferencia importante entre las coronas dentales y las carillas dentales. Las coronas dentales suelen ser más costosas que las carillas dentales debido a la cantidad de trabajo dental que se requiere para colocarlas. Además, las coronas pueden requerir múltiples visitas al dentista para completar el tratamiento. Las carillas dentales, por otro lado, suelen ser menos costosas y requieren menos visitas al dentista para completar el tratamiento.
En resumen, tanto las coronas dentales como las carillas dentales son tratamientos efectivos para mejorar la apariencia y la salud dental. Sin embargo, cada tratamiento tiene sus propias ventajas y desventajas y es preciso que el paciente las conozca a través de su dentista.
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